martes, 6 de marzo de 2012

Regata Olarru Cup 3.03.12


En invierno, un mes sin regatas supone muchas veces un mes sin navegar. A mí me ha venido bien para ir a Madrid y atender a mi madre que, con sus 86 años, empieza a necesitar que los hijos nos ocupemos de sus cosas y de organizarle un poco el entorno vital, de acuerdo con el previsible deterioro de sus facultades. Pero, bien sea por que estaba en Majadahonda o porque estando en mi casa hacía un tiempo de perros, lo cierto es que no había navegado desde la anterior regata, la del 4 de febrero… ¡Una eternidad!. O al menos eso me ha parecido cuando el viernes volví a soltar las amarras del  Trapaia y salí a navegar. ¡Qué torpe!. Me sentía inseguro sobre la cubierta, despistado y olvidadizo en las maniobras, como propenso al mareo… ¡Un desastre!. Parece ser que no se puede dejar tanto tiempo sin salir a la mar, especialmente con 65 años a la espalda. 

Pero bueno, mi salida del viernes, que al principio  de la tarde fue casi sin viento, terminó con un oeste de entre 11 y 17 nudos que, con una mar excelente, me permitió retomar un poco el pulso del Trapaia. El tiempo se puso feo, frío y oscuro con mucha bruma. Pero el viento y la mar parecían decirme “dale duro, tensa el back y a ceñir, 5 nudos, 6 nudos, siete, bonita escora, ¡Yuuujjjuuu!. 

Así que el sábado por la mañana ya me sentía en mejor condición y con más ánimo para regatear. El tiempo estaba soleado templadito y precioso. La única pega era que la predicción meteo auguraba poquísimo viento y se cumplió. 

La regata era una “L” con el vértice en la boya de salida frente al espigón de la bocana de la ría. Los extremos de la “L” eran una boya al norte y otra al oeste, ambas a 1,5 millas del vértice. Había que ir a las dos boyas, con opción libre del orden pero pasando por la del vértice, y volver a la línea de salida. Por lo tanto la primera condición que marcaría la regata es la elección táctica del recorrido. Y más aún la marcaría, ya que, previendo la falta de viento para completar la regata, se estableció que si ningún barco fuese capaz de remontar alguna de las dos boyas (N u W) en el plazo de una hora, la regata quedaría reducida a un solo recorrido, a una sola de las dos boyas (la que cada barco hubiera escogido) y retorno a meta. La elección se ponía difícil y comprometida.

Estábamos 6 barcos en la salida: Maixu, Zagit, Odin, Txiripa, Trapaia y Geldi-Geldi. Afortunadamente, a la llamada de “Josean Comité” en el minuto de la salida, el señor Viento tuvo la amabilidad de presentarse y tomó la salida con nosotros. Esto nos animó a todos un poco, porque ya nos veíamos flotando a la deriva durante unas cuantas horas…

La ventolina del SW, soplaba de tierra a mar. Pero por la hora que era (11AM) no parecía lógico que fuese una brisa terral. De cualquier forma con esa dirección del viento todos optamos por ir a la boya oeste con el viento real por los 45-50º de la amura de babor lo que se convertía, en viento aparente, a una ceñida de unos 30-40º que nos llevaba un tanto mar adentro, con lo cual nos veríamos obligados a hacer otro bordo para alcanzar la boya, pero la cosa es que el barco navegaba y suspirábamos por que la escasa brisilla no decayese. 

Hay otra cosa que nos despistó. El Phenix, con su tripulación de alto nivel, sus velas de regata y el enorme palo negro de carbono, estaba por allí entrenando. Lo vimos acercarse a la costa, donde se veía una franja de agua rizada que hacía sospechar que había algo más de viento. Sabiendo lo bien que su patrón (Ricardo Peña) conoce este campo de regateo nos pareció oportuno irnos hacia allá. Craso error, porque ese barco navega hasta con el viento de las alas de una mariposa y los nuestros no. Para cuando nosotros alcanzamos la zona descrita, ya no estaba rizada, ni había brisa ni na de na, y el Phenix estaba lejos, lejos y más lejos… ¡Menos mal que no estaba en nuestra regata!.

Hasta ese momento todos los barcos de la regata íbamos en dirección a la boya oeste. En el Trapaia, visto lo que había (o más bien lo que no había) cerca de la costa, rectificamos y muy lentamente nos fuimos volviendo hacia el NW. Avanzando casi exclusivamente con el viento del balanceo y con mucha paciencia conseguimos recuperar la cabeza de la flota, unos pocos metros por delante del Geldi-Geldi. El resto de la flota no estaba muy lejos y, como no habían hecho el intento de acercarse a costa, cuando entró una racha la recibieron mejor y se nos acercaron. El Txiripa de Patxi, que navegaba con  su madre y sin Esther (que estaba en casa con gripe) se nos puso en paralelo y parecía que todos íbamos a poder alcanzar la deseada boya oeste.

En este punto se produjo un cambio sustancial en la evolución de la regata. Pedro, que navegaba en solitario con su Geldi-Geldi, parece que no tuvo que discutir mucho consigo mismo para de pronto tomar una decisión drástica.  Giró 100º a estribor y decidió irse a por la boya norte. El resto de la flota continuaba hacia el oeste. 

Pasó una hora sin que ni el Geldi-Geldi alcanzase la boya norte ni nosotros la boya del oeste. Por lo tanto quedaba recortada la regata y una vez virada la boya que fuese, volvíamos hacia meta y allí se acababa.
Txiripa y Trapaia continuamos encabezando la flota que iba hacia el oeste, navegando de ceñida y calculando el momento adecuado para virar hacia la boya. Cuando nos pareció que teníamos garantizado el ángulo de viento viramos y comprobamos que el cálculo había sido correcto. Soplaba una brisita y llevábamos rumbo directo a la boya con cierta holgura en la ceñida. El Txiripa, no sabemos por qué, tardó bastante más en virar, pero también lo hizo.

En esto vino lo peor del día. Cuando el Geldi-Geldi comunicaba por radio que estaba virando la boya del norte, a nosotros nos faltaban 500 metros para alcanzar la del oeste, pero estábamos absolutamente parados, con viento cero, mirando como flotaba la boya que no podíamos alcanzar. ¡UN ACIERTO IMPRESIONANTE DEL GELDI-GELDI!.  Un error fatal del Trapaia que ya no tenía ninguna opción para remediarlo. 

En esto el Txiripa a quien la encalmada había pillado mucho más atrás, por haber virado demasiado tarde, decide retirarse y nos damos cuenta de que toda la flota ha decidido cambiar de opción y dirigirse hacia la boya norte. El Geldi-Geldi era ya absolutamente inalcanzable para cualquiera de los barcos de la flota, pero todos vieron que en su trayectoria había al menos algo de viento y que era la única opción que daba posibilidades de terminar dentro del tiempo límite. 

Para el Trapaia era demasiado tarde. Ya no había opción. ¡Gran desventaja de ir el primero en el rumbo equivocado…! Estábamos en ese momento más lejos que nadie de la boya norte y más cerca que nadie de la boya oeste, pero absolutamente parados, mirándola con desesperación. No había alternativa… Solo el Maixu que había optado por un trayecto muy próximo a costa nos acompañó hasta el final en la opción oeste. 

Tediosas horas. Un recuerdo para los navegantes oceánicos cuando pasan las grandes encalmadas, los Doldrums ecuatoriales del Atlántico. Tiempo para preparar dos rondas de  bocatas y cervecitas. No nos dimos un baño porque la temperatura del agua no es la del verano, pero hubo momentos en que incluso apetecía, porque llegamos a pasar calor. Con un polo de manga corta se estaba en cubierta tan a gusto como en un buen día de primavera. La verdad, creo que el día estaba tan agradable que no se retiró nadie, a pesar del derroche de paciencia que tuvimos que emplear. 

Pero Pedro, con su Geldi-Geldi, entraba en meta cuando nosotros continuábamos parados y los otros que optaron más tarde por seguir su trayectoria, tuvieron una brisita que les permitió continuar avanzando un poquito casi todo el tiempo. 

En el Trapaia, en varias ocasiones estuvimos calculando que no podríamos entrar en meta dentro del tiempo límite (para nosotros de 4h19min). Antes de la boya avanzábamos a velocidades de cero a medio nudo. Después de virar la boya empezamos a navegar entre 0,3 y 0,8 nudos. Pero entonces, después de que el Maixu, en que Kastor navegaba en solitario, virase la boya y aprovechase para recogerla, saltó un delicioso vientecillo del nordeste, refrescante, maravilloso… ¡La paciencia siempre tiene premio!. Daba pena que la regata se acabase, porque después de taaaaaaanto esperar, ahora daba gusto navegar.

Y ¿qué ocurrió con el curso de la regata?. Pues que de pronto vimos todos que podríamos entrar en el tiempo límite establecido. Increíble, pero cierto. Al menos la entrada en meta fue digna y honorable y no penosa y lenta como había sido la mayor parte de la regata. 

El Trapaia entró en segundo lugar (en tiempo real) pero nada menos que 1h 36´ más tarde que el Geldi-Geldi. Además toda la flota se había agrupado y entrabamos todos (entiéndase los 5, Geldi-geldi aparte) en un lapso de menos de un cuarto de hora, lo que significaba claramente que después de una regata tan larga, al aplicar la compensación de tiempos según rating, el Trapaia quedaría el último clasificado, como evidentemente así fue.


Otro evento a destacar en ese día fue la primera comida en comunidad, después de la regata, que se celebro en el nuevo local de nuestro flamante Club Nautico de Zumaia. Cada cual aportó lo que pudo y, aunque todavía no teníamos microondas para calentar las cosas, comimos bien y bebimos y sobre todo charlamos y reímos y por supuesto discutimos… Buen ambiente, si señor. Arantxa nos hizo esta foto. Esto del club puede dar juego. 

Varios socios ya hemos estrenado también el taller para hacer algunas chapucillas y se están planificando cursillos de diversos temas. Aprovecho para comentar que me sorprendió gratamente la gran afluencia de socios a la asamblea del sábado anterior y el hecho de que cuando hubo que votar para ver si se hacía una nueva derrama de otros 100€ para terminar algunas cosas, como el aire acondicionado, la TV, etc. La decisión fuera unánimemente favorable. Eso significa que la gente valora mucho la actividad del club y la disposición del local social que hasta ahora no teníamos. 

Finalmente quiero decir que, después de la derrota en la clasificación de esta regata, el Trapaia continúa liderando la general.  Ahí la pongo. 

OLARRU CUP 03/03/2012
NOMBRE
MODELO
TCC
TIEMPO REAL
TIEMPO EN SEGUNDOS
TIEMPO COMPENSADO
CLASIFIC.
GELDI-GELDI
BENETEAU OCEANIS 40 1.95
0,974
2:22:48
8568
8345,232
1
MAIXU
BENETEAU FIRST 260
0,859
4:00:36
14436
12400,524
2
ZAGIT BI
JEANNEAU SUN ODISSEY 26
0,833
4:11:09
15069
12552,477
3
ODIN 2
GIB SEA 282
0,86
4:13:07
15187
13060,82
4
TRAPAIA
BENETEAU FIRST 32
0,918
3:58:26
14306
13132,908
5
TXIRIPA BI
DELHLER 31
0,899
RETIRADO
-
-
7

CLASIFICACION PROVISIONAL OLARRU CUP 2011
NOMBRE
MODELO
12-oct
22-oct
19-nov
03-dic
21-ene
28-ene
04-feb
03-mar
Clasifi.
TRAPAIA
BENETEAU FIRST 32
-
1
6
1
1
2
1
5
17
GELDI-GELDI
BENETEAU OCEANIS 40 1.95
-
3
3
5
2
4
2
1
20
TXIRIPA BI
DELHLER 31
-
6
5
2
3
5
5
7
33
ZAGIT BI
JEANNEAU SUN ODISSEY 26
-
7
8
11
6
3
5
3
43
MAIXU
BENETEAU FIRST 260
-
5
7
3
5
6
25
2
53
D&J
BAVARIA 31 CRUISER
-
2
2
11
4
1
25
25
70
ODIN 2
GIB SEA 282
-
25
10
11
25
7
25
4
107
LUMA
BENETEAU OCEANIS 40
-
4
1
4
25
25
25
25
109
LAPATXO
EDEL VI
-
8
4
11
25
25
25
25
123
EL BOCAL
BENETEAU OCEANIS 31
-
25
25
11
25
8
25
25
144
MOWGLI
SLOOP MARCONI
-
25
9
25
25
25
25
25
159
YETE
BAVARIA 31
-
25
13
25
25
25
25
25
163
ELEUNA
JEANNEAU SUN 2000
-
25
13
25
25
25
25
25
163
MAKROLL
GIB SEA 42
-
25
25
25
25
25
25
25
175
POTOLITO
BAVARIA 35 MATCH
-
25
25
25
25
25
25
25
175
MIL-LENARI
PUMA 32
-
25
25
25
25
25
25
25
175
KRAKEN
BENETEAU FIRST 211
-
25
25
25
25
25
25
25
175

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