martes, 20 de marzo de 2012

Regata Olarru Cup 17.03.12 (la complicada)



La regata más larga de la liga Olarru:    Zumaia – Lekeitio – Zumaia = 22 millas.
Salida a las 11h (Hora oficial) y tiempo límite de 8h corregido al alza según el rating de cada barco.


Previsión meteo muy unánime en todos los portales especializados de internet: viento de unos 8 a 10 nudos del SE rolando a SW racheado con picos de hasta 20 nudos y finalmente a W y NW.  El cambio a NW podría ir acompañado de fuertes rachas de hasta 30 nudos. Ola suave de fondo de 1 metro de altura, con período muy largo y mar de viento rizada y tranquila hasta la rolada.

La reunión previa se celebró a las 10H en el local del club, estrenando gran pantalla de TV conectada al ordenador para visualizar el recorrido y las previsiones de viento. ¡Que nivel!. 

El primer problema que se presentó y que se trató en la reunión fue que de momento, a esa hora, el pronóstico no se estaba cumpliendo. Ya que debiera haber algo de viento sur y prácticamente no había nada. Así que se tomó la decisión de que si ningún barco alcanzaba la boya de Lekeitio antes de las 15h se establecería como línea de llegada la formada por la citada boya y la punta de la isla de San Nicolás, terminando allí la regata. 

8 barcos en la línea de salida. Eleuna, Txiripa Bi, Luma, Zagit Bi, D&J, Maixu, Trapaia y un advenedizo adversario, el Teo Pen, el Atlas 1000 de Josu, tripulante habitual del Trapaia, que (previo permiso de la organización) participaba a modo de ensayo, fuera de clasificación, y casi con el único avieso objetivo de medir sus fuerzas con el Trapaia y ¡DERROTARLO!. Al efecto, el traidorrrr, limpió el casco dos días antes, no os digo más. 


El arranque de la regata fue lento y complicado, por escasez de viento y por la suma variabilidad del origen del mismo. De momento soplaba más del NE que del SE, pero además cambiaba cada minuto a S y de nuevo a N o se encalmaba por completo en un radio de 200m mientras un poco más lejos había barcos navegando con escora… En definitiva, continuos cambios de bordo, adelantamientos insospechados, recuperaciones increíbles, viendo incluso como varios barcos que navegaban en la misma dirección iban en amuras opuestas, recibiendo el viento unos por babor y otros por estribor. Pero en conjunto la cosa iba muy lenta. Empezábamos a pensar que la regata se terminaría en Lekeitio, si se terminaba…

El Txiripa y algunos otros optaron por acercarse a la costa y durante un rato parecía que habían acertado, porque una larga racha de viento suave del sur les hizo ponerse en cabeza de la flota.  Un poco más mar adentro, navegábamos con viento inconstante, más bien del N, Luma, Zagit, Teo Pen y Trapaia. Íbamos alternando posiciones cada vez que una rachita entraba por un lado y se iba por el otro, dejándonos parados otra vez. 


El Luma que iba más por fuera, con un grupo de nuevos marineros en prácticas, era el primero que recibía algunas rachas y de pronto daba un buen salto adelante, que hacía gritar de satisfacción al nutrido grupo de tripulantes, que sin duda lo estaba pasando muy bien, viendo como los demás permanecíamos semi-parados, pero a los pocos minutos las cosas se ponían del revés.

Por fin, apareció el anunciado viento S que parecía querer entablarse, y el Trapaia consiguió adelantarse un poco al Txiripa que por lo visto tardó algo más en recibir el viento, y manteniendo a nuestra popa al Luma y al Teo-Pen, pero de pronto el viento se paró. Estuvimos un buen rato casi parados. 

Txiripa, preguntaba por radio donde estaba el viento sur tan anunciado y me tomaba el pelo a mí, porque yo había dicho en el pantalán que la regata duraría poco más de 5 horas, y como máximo 6. Acto seguido se retiraron, cosa que no nos sorprendió porque hacía honor a su ya reiterada decisión de no ejercitar la paciencia en cuando el viento escasea durante más de un cuarto de hora. 

Pero lo que también parece ya una costumbre es que el viento aparezca en cuanto se retira el Txiripa y esta vez también fue así. Así que la próxima vez que haya poco viento lo que tiene que hacer el Txiripa es retirase antes… ¡Je, je!

Y el viento sur vino como suele ser el viento sur en el Cantábrico. Fresco y con rachas más fuertes, especialmente en las embocaduras de los valles de la costa, y también con alguna pequeña encalmada. Pero de pronto navegábamos a toda velocidad y además a rumbo directo hacia la boya de Lekeitio. 

Cuando algunas rachas alcanzaron los 26 nudos y duraron cierto tiempo, decidimos tomar un rizo de la mayor. Prácticamente no perdimos velocidad ni durante la maniobra ni después y empezamos a navegar mucho más relajados, con una escora mucho más razonable y por encima de los 6 e incluso de los 7 nudos. Para ese momento solamente nos seguía de cerca el “traidor” Teo Pen, que nos hizo pelear lo nuestro para sacarle ventaja, más por ganancia de barlovento que por velocidad. En algún momento casi nos alcanza porque le favoreció una racha, pero cuando nos llegó a nosotros, también supimos aprovecharla y recuperamos la distancia perdida. 

En esto el viento redujo sensiblemente su velocidad y volvimos a quitar el rizo y subir toda la mayor para obtener el mejor aprovechamiento. Lógicamente el Teo Pen hizo lo propio. 

Así aunque cada vez con menos velocidad y más tranquilidad, navegamos hacia Lekeitio y cuando el GPS nos indicaba que estábamos a media milla de la boya empezamos a intentar localizarla visualmente. Navegábamos a menos de 2 nudos, con muchas ganas de verla, pero resultaba imposible, incluso para Alberto que tiene una vista espectacular. Cuando el GPS nos dijo que estábamos encima de la boya… empezamos a ver donde estaba. Se hallaba  unos 200 metros más al oeste de las coordenadas, cosa que comunicamos al resto de participantes, porque con el escaso viento reinante en ese momento en la zona, resultaba bastante desesperante andar buscando la boya donde no estaba. 

Recién virada la boya y cuando ya regresábamos hacia Zumaia, a unos 200 o 300 metros nos cruzamos con el Teo Pen que iba hacia boya y un poco más adelante con el Luma. Yo creo que ambos se nos habían acercado bastante durante el rato de encalmada que nos retuvo a nosotros frente a la isla de San Nicolás. 


Cuando salimos de la virada de boya el leve viento era del NE y casi nos obligaba a dirigirnos hacia la isla. Pero justo cuando cruzábamos al Luma, roló al NW. De hecho, habíamos iniciado un rumbo para cruzar al Luma dejándolo por babor, cuando la rolada nos incitó a cambiar la decisión y virar y salir en dirección NE, dejando al Luma por estribor. Este momento de la regata fue clave para lo que vino después.

 Nuestra idea era salir en dirección NE, con el aparente por el través de babor, hasta alcanzar una posición que nos permitiera arribar para poner el spinaker y navegar con el viento aparente de aleta, por los 120º de la proa, a rumbo directo hasta Zumaia. 

Lo cierto es que esa primera racha de NW que nos sacó de Lekeitio, debió de ser un regalo exclusivo del Señor Viento para el Trapaia, porque los demás al parecer se quedaron atrapados en la encalmada de Lekeitio. El Luma se aburrió y se retiró, para irse con sus tripulantes de prácticas a tomar un piscolabis a Lekeitio. Dado lo que pasó después, espero con interés que Txonpe me cuente como hicieron el viaje de regreso…

Cuando calculamos que podríamos tener rumbo de spi (teniendo en cuenta el viento real, el rumbo actual del barco y el ángulo a girar para dirigirnos a Zumaia) pusimos rumbo e izamos el Spinaker. Pero el viento se puso a rolar mucho al norte y, puestos a rumbo de Zumaia, el aparente se ponía de través, un rumbo muy inadecuado para un spi simétrico. No conseguimos que pintase bien y además no ganábamos apenas velocidad, así que arriamos y continuamos con Génova y con buena velocidad y mucha tranquilidad disfrutando del sol y de un viento muy agradable y bastante entablado, que nos permitió preparar unos bocatas de pollo empanado y tomarnos unos vinos y unas cervecitas. ¡Un verdadero y largo rato de placer!. Un placer que naturalmente aumenta viendo que nadie nos sigue… Es más, con la bruma que venía entrando por el oeste solo atisbábamos con dificultad las velas del Teo Pen y estas las veíamos tremendamente lejos. Los demás quedaban por detrás de la inescrutable cortina de niebla.

No obstante comentamos varias veces que parecía que del oeste venía un chubasco que nos perseguía. La duda estaba solamente en si nos llegaría antes o después de que alcanzásemos la meta de llegada y la entrada del puerto. Estábamos hablando de esto cuando Jancar, del D&J, nos comunicaba por radio que ellos a la altura de Ondárroa tenían encima una galerna de 30 nudos. 

Nos faltaba una milla para llegar cuando la nube oscura nos alcanzó y nos privó de las delicias del sol. 10 minutos más tarde cruzábamos la línea de meta recogiendo la Génova y largando la mayor porque teníamos la galerna encima. Empezó llover y en un instante el mar se puso plagado de borreguitos. Metimos motor, viramos rápidamente y nos metimos en la ría con la mayor largada en banda, para arriarla y plegarla detrás del espigón, protegidos del vendaval del NW. 

Subiendo por la ría hacia el puerto deportivo, mientras arranchábamos y colocábamos las defensas notábamos como se intensificaban por momentos la lluvia y el viento. Yo iba pensando en lo difícil que podría resultar el atraque en el pantalán en estas condiciones. Pensaba: “¡Menos mal que en esta ocasión estamos 3 a bordo y hoy no viajo solo!”.

La maniobra de atraque tuvo “su cosilla”, pero no fue tan difícil. Lo único malo es que para entonces ya estábamos empapados, pero nos consolaba totalmente pensar que al fin y al cabo, nos habíamos librado de lo peor y habíamos hecho una regata sensacional, de las que dan momentos de trabajo intenso, de impotencia, de paciencia, de gozo placentero, de frío, de calor, de relax, de estrés y de esa adrenalina tan necesaria para vivir con intensidad.  

Y entonces suena mi teléfono móvil. Lo cojo y digo
  • Hola, ¿Qué pasa Juancar?.
  • No soy Juancar, es el teléfono de Juancar pero soy Roberto. Te llamo desde el D&J, para ver si sabéis algo del Zagit porque iba cerca  de nosotros aunque le veíamos mal por la bruma y de pronto hemos dejado de verle. Creemos que ha roto el palo o algo así, porque ha desaparecido de la vista. Tenemos rachas de casi 50 nudos de viento y no podemos acercarnos ni a motor hasta donde están ellos. Te dejo, que me está entrando una llamada.
Nos quedamos como os podéis imaginar… Como habíamos oído que el Teo Pen había entrado ya en meta y sé que Josu tiene algún parentesco con Ricardo, del Zagit, pensé que tendría probablemente su nº de teléfono móvil y le llamé para notificarle la situación pero no me contestaba, porque probablemente estaría solucionando sus propios problemas para el atraque. Puse el canal 74, de salvamento de Getaria. Vuelve a sonar mi móvil. Otra vez Roberto del D&J:

  • Ya está controlado. Está avisado Salvamento marítimo y salen al rescate. Efectivamente han desarbolado y están navegando a motor. Al desarbolar han perdido antena y no disponen de radio, por eso se está haciendo todo por el teléfono móvil, al parecer se dirigen a Getaria por mejor seguridad de entrada en estas condiciones, nosotros también vamos a Getaria”.
  • Por la entrada en la ría de Zumaia no os preocupéis que no hay ninguna dificultad. Ya hemos entrado nosotros y el Teo Pen. Todavía no hay ola y no se forma barra. No hace falta que vayáis a Getaria.
Suena la radio y es la embarcación de salvamento de Getaria, reportando al centro de salvamento de Bilbao. Explican efectivamente que han localizado la embarcación, que se encuentra desarbolada pero navegando con su propio motor con el aparejo de la jarcia sobre la cubierta y que no hay daños personales en los tripulantes. Están hablando por teléfono con ellos y por el momento se limitarán a acompañarles a puerto, ya que al parecer no precisan remolque. 

Como nos habían dicho antes que se dirigían a Getaria le llamé de nuevo a Josu. Esta vez si me respondió y le comuniqué la situación. Le pedí que se pusiera en contacto con Ricardo y le preguntase si iban a necesitar ayuda en Getaria, para coger el coche e ir hacia allí. Me dijo que hablaría y que si le hiciera falta ayuda iría él mismo. 

Empezamos a respirar tranquilos y a pensar en calentar algo para comer, cuando apareció Kastor en su Maixu, con una vela rota sobre la cubierta y la mayor arriada en desorden, de cualquier manera, sobre la botavara. Continuaba haciendo mucho viento que dificultaba el atraque y varios del pantalán acudieron a ayudarle. 

Kastor también había tenido esta vez su dosis de aventura. Primero había tenido que tirarse al agua antes de la salida para desenredar algo que se le había enganchado, no recuerdo si en la hélice o en el timón. Y después de tan “agradable refresco” vestirse y a salir en la regata… el solo.   

Desde luego, la dureza y la capacidad de sobreponerse a las adversidades que demuestra Kastor, me sorprende cada día más. ¡OLE TUS HUEVOS; KASTOR!. Yo desde luego habría pedido que alguien me remolcase y me habría quedado en el puerto. Sí, ya sé que antes de la salida la mar estaba como un plato y que el agua en realidad no está tan fría en relación con el ambiente, de hecho hay quien se baña todos los días del año y dicen que es muy sano, pero aún contando con todo eso hace falta decisión para meterse y más para después continuar en la regata y más para terminar en segundo lugar, como después se ha visto en la clasificación. TE MERECES UN ABRAZO Y UN GRAN APLAUSO. Lo que lamento es que hayas roto otra vela. Esperemos que esta tenga arreglo y no haya que hacerla nueva.

Estábamos en el pantalán con lo de Kastor y en ese momento aparecía entrando el Zagit. Por lo visto se habían dejado aconsejar para entrar en Zumaia en vez de ir hasta Getaria. Detrás entraba la embarcación de Salvamento Marítimo. Es penoso contemplar un velero con toda la jarcia firme sobre la cubierta. Lamento no haberme acordado de sacarle  fotos para ponerlas aquí, pero es que en esos momentos solo un reportero profesional se acuerda de la cámara y yo no soy ese profesional, lo siento por los que no pudisteis verlo y por no disponer de un recuerdo para los que sí lo vimos. La cosa es que a nadie le ha pillado el mástil debajo en la caída y que el velero y la tripulación están en puerto. 

Foto enviada por Josean después de la redacción de esta crónica
Ricardo, amigo, yo creo que es conveniente investigar cual ha sido la causa del problema. Un velero que es muy nuevo no puede desarbolar por una racha fuerte de viento. Algo tiene que haber fallado estrepitosamente. Todos hemos visto en alguna ocasión un velero dando una buena orzada, o incluso tocando el agua con las crucetas, por alguna de las muy diversas razones que lo pueden colocar en esa situación. Pero ni en esa situación extrema tiene que romperse nada y el velero tiene que adrizar, máxime cuando realmente es una situación en que no hay olas rompientes, ni siquiera ola de fondo muy grande, sino solo viento. ¿Qué pasó?. ¿Tal vez una trasluchada muy violenta? Pero lo pienso y no me imagino el motivo. En fin ya nos contarás tu que lo viviste y que supongo lo analizarás. Por el momento creo que todos te acompañamos en el sentimiento, entre otras cosas porque egoístamente nos recuerda que………… ¡OJO!.

Y bueno, aquí pongo una vez más la clasificación de la regata y la general. Solo nos queda una para completar el ciclo, la de por equipos de dos barcos al relevo. Una fórmula original y novedosa de regatear. Oye, “Señor Comité” y ¿Cómo se hace luego la inclusión de esa regata en la clasificación general? ¿Ó es que va aparte y no influye…?.
Termino de escribir esto y recibo el correo de Ricardo, del Zagit con el siguiente texto que copio directamente:

Gracias a todos en nombre de la tripulación del Zagit Bi por el apoyo a la llegada a puerto. Solos, nos hubiese costado un triunfo desmontar todo el tinglado de jarcias y demás. En especial a la tripulación del D&J que dió aviso a Salvamento Marítimo en cuanto vió que nos quedábamos sin palo.

Con la prespectiva que dan 48 horas de reflexión y análisis, creo que fué una temeridad intentar hacer el regreso a la vela. Teniendo en cuenta, además, que no había gran cosa por la que luchar. Acaso ganarle al Maixu, gran competidor, que también tuvo lo suyo!!

Así como enseguida nos gusta sacar el spi, no tenemos mayor problema en rizar. De hecho, en la ida y con el suroeste, tomamos un rizo, en una de las arreciadas. Luego llegó la encalmada y teníamos la mirada puesta en la corredera. 0,5 nudos, 3, 4, 6, 7 nudos... Nunca habíamos navegado así en el Zagit, por lo que estábamos disfrutando como enanos...lo último que pensábamos era que iba a partir. Probablemente si no hubiéramos estado en regata hubiéramos arriado todo. Creo que lo que partió fué la cruceta, por la presión que hacía la mayor. Esto desequilibró todo y el palo partió, después de revirar un poco. Recuerdo que solo unos instantes antes le comenté a Mandiola: No pierdas de vista la driza de la mayor, por si tenemos que arriar...

Después la hecatombe. Estado de shock que duró un segundo. ¿Cómo vamos a salir de esta?.

Tuvimos inmensa suerte al quedar todo el aparejo dentro del barco. Cuando comprobamos eso arrancamos cuanto antes el motor para no quedarmos atravesados. Mandiola y Pil amarrando en cubierta lo que podían y yo gobernando sin perder de vista la ola, concentradísimo. Sin radio, el walky sin batería...las ola amenazando por popa...

Afortunadamente el D&J ya había dado aviso a Salvamento y nos llamaron por teléfono. Esto nos tranquilizó mucho, pero había que llegar a puerto. No sabíamos cómo estaba la entrada de Zumaia y barajamos la posibilidad de arribar a Getaria. Con la embarcación de Salvamento al costado entramos en Zumaia.

El resto ya lo conocéis. Rostros pálidos y culos prietos...

Para terminar un refrán: "Lo que se promete en la tempestad, se olvida en la calma".

No sé cuándo regresaremos a la alta competición. Abrazos sinceros a todos.
 
Pues nada Ricardo, que os esperamos pronto en la “ALTA COMPETICIÓN” como tú dices, aunque de momento solo queda una regata y después la famosa “Dos Cabos” de las 100 millas. Entre tanto si hacemos salidas turísticas y queréis navegar en el Trapaia no tenéis más que decirlo, por supuesto.











OLARRU CUP 17/03/2012


NOMBRE
MODELO
TCC
TIEMPO REAL
TIEMPO EN SEGUNDOS
TIEMPO COMPENS.
CLASIFIC.


TRAPAIA
BENETEAU FIRST 32
0,918
5:48:36
20916
19200,888
1


MAIXU
BENETEAU FIRST 260
0,859
6:43:30
24210
20796,39
2


D&J
BAVARIA 31 CRUISER
0,897
RET
-
-
8


ZAGIT BI
JEANNEAU SUN ODISSEY 26
0,833
RET

-
8


LUMA
BENETEAU OCEANIS 40
0,96
RET
-
.
8


TXIRIPA BI
DELHLER 31
0,899
RET
-
-
8


ELEUNA
JEANNEAU SUN 2000
0,784
RET
-
-
8










 
CLASIFICACION PROVISIONAL OLARRU CUP 2011
NOMBRE
MODELO
12-
oct
22-
oct
19-
nov
03-
dic
21-
ene
28-
ene
04-
feb
03-
mar
17-
mar
Puntos
TRAPAIA
BENETEAU FIRST 32
-
1
6
1
1
2
1
5
1
18
TXIRIPA BI
DELHLER 31
-
6
5
2
3
5
5
7
8
41
GELDI-GELDI
BENETEAU OCEANIS 40 1.95
-
3
3
5
2
4
2
1
25
45
ZAGIT BI
JEANNEAU SUN ODISSEY 26
-
7
8
11
6
3
5
3
8
51
MAIXU
BENETEAU FIRST 260
-
5
7
3
5
6
25
2
2
55
D&J
BAVARIA 31 CRUISER
-
2
2
11
4
1
25
25
8
78
LUMA
BENETEAU OCEANIS 40
-
4
1
4
25
25
25
25
8
117
ODIN 2
GIB SEA 282
-
25
10
11
25
7
25
4
25
132
LAPATXO
EDEL VI
-
8
4
11
25
25
25
25
25
148
EL BOCAL
BENETEAU OCEANIS 31
-
25
25
11
25
8
25
25
25
169
ELEUNA
JEANNEAU SUN 2000
-
25
13
25
25
25
25
25
8
171
MOWGLI
SLOOP MARCONI
-
25
9
25
25
25
25
25
25
184
YETE
BAVARIA 31
-
25
13
25
25
25
25
25
25
188
POTOLITO
BAVARIA 35 MATCH
-
25
25
25
25
25
25
25
25
200